Las estructuras metálicas tienen innumerables ventajas frente a otras formas de construcción, por ello, algunas razones para elegir el acero son: su excelente relación resistencia / volumen (que consigue más estructuras ligeras que las fabricadas con otros materiales), el amplio abanico de sus posibles aplicaciones, la posibilidad de tener muchas piezas estandarizadas, su confiabilidad y su capacidad para dar forma a casi todos los deseos arquitectónicos.